La hora menguada
Datos del contenido
La hora menguada
Resumen
Rosita, la Linda Encajera, cuya memoria conservan todavía algunos ancianos de la villa de Oropesa, que admiraron su peregrina hermosura, la bondad de su carácter y las primorosas labores de sus manos, fue el ángel tutelar de mi dichosa infancia. Su cariño, su ternura y solicitud maternales eran sin límites para conmigo, y yo le daba siempre con gozo y verdadero orgullo el dulce nombre de madre. Pero ella me llamó solamente «el niño», menos dos o tres veces en las que la palabra «hijo» se le escapó, como un grito irresistible de la naturaleza, que parecía desgarrar de un modo muy cruel sus entrañas.
Tomado del texto original
Fecha: 10/11/2031
Editorial
Editorial Cardo
Colecciones
Archivos
Descripción:
La_hora_menguada.pdf
Título: La_hora_menguada.pdf
Tamaño: 63.31Kb
Inicie sesión para leer el PDF
Título: La_hora_menguada.pdf
Tamaño: 63.31Kb


Carátula
