Lilith
Datos del contenido
Lilith
el juicio de la gorgona y la sonriza de Salgari
Resumen
La Peña, el peonza y la causalidad.
Después de darle muchas vueltas y sopesar otras posibilidades he optado por la educación y comenzaré esta narración presentándome. Mi nombre es Alfredo García Torrecilla y nací, hace cincuenta y pocos años, en un pueblecito de Cáceres de nombre Aliseda. Mis padres eran oriundos de la zona y llevaban una apacible vida campesina hasta que la llegada de su primer y a la postre único hijo vino a trastornarla. Tengo vagos recuerdos del pueblo, recuerdo de manera difusa las tardes de calor ondulante incrustado en las paredes encaladas, cociendo lagartijas ociosas y atontando a las moscas. Lo único que recuerdo con toda claridad es una pequeña peña que se encontraba a la puerta del corral y que se convirtió, desde que descubrí la utilidad de las dos extremidades que nacían de mi cintura, en el mayor reto de mi infancia. Desde que tuve uso de conciencia la peña a la puerta del corral fue mi némesis. Sólo vivía para coronar sus dos metros de altura que, a mis ojos, eran casi insalvables; allí me pasaba horas y horas que siempre se traducían en constelaciones de moratones y arañazos cuando la peña me derrotaba. Otro niño se hubiera divertido correteando tras las gallinas –que hacían cima con insultante facilidad–, jugando con los perros de la casa o torturando a las lagartijas ociosas cocidas por el sol pero yo me decanté por la superación personal y por esa maldita peña. Un día el padre de mi padre, hombre de campo y por tanto práctico, tomó al hijo
Materia
Colecciones
Archivos
Descripción:
Lilith_el_juicio_de_la_gorgona_y_la_sonriza_de_Salgari.docx
Título: Lilith_el_juicio_de_la_gorgona_y_la_sonriza_de_Salgari.docx
Tamaño: 81.35Kb
Inicie sesión para leer el word
Título: Lilith_el_juicio_de_la_gorgona_y_la_sonriza_de_Salgari.docx
Tamaño: 81.35Kb


Carátula
