Durante más de medio siglo, las Naciones Unidas han sido para los EE.UU. el foro central donde intentar crear un mundo a su imagen y semejanza,
maniobrando con sus aliados para forjar acuerdos globales sobre derechos humanos, pruebas nucleares o medio ambiente que, según insistía Washington, reflejarían sus propios valores.
Tomado del texto original
Fecha de reseña: 16/12/2016