TI - El tiempo de las multitudes AU - Autor desconocido AB - Nosotros todos, discípulos y maestros – que somos también discípulos de otros maestros más universales – estamos aprendiendo a ser acuarianos y a asumir dimensiones crecientes de Libertad. Desde que, en la expresión del Apocalipsis de Juan (Capítulo 12, versículo10), llegó la salvación, el poder y la realeza de nuestro Dios, así como la autoridad de su Cristo, porqué fue precipitado el acusador de nuestros hermanos, que los acusaba, día y noche, delante nuestro Dios”, desde que las fuerzas más tenebrosas con manifestación en la Tierra (aún que de fuentes extraplanetarias o extra-sistémicas) fueron derrotadas en los planos más sutiles, muchas afluencias energéticas casi insospechadas se permitieron y, hasta para nosotros, la Libertad y los contornos de la Nueva Era ganaron perspectivas y posibilidades, hasta entonces ignotas. Clarificada la situación en los planos superiores, formados allí los gérmenes arquetípicos (y, no obstante, ya actuantes) de impulsos avasalladores, importa ahora desenvolver y hacer descender hasta el plano físico y a los niveles que se encuentran más próximos, la manifestación de esos impulsos que, al final, constituirán también nuevas exigencias. Es en esos planos del Universo Terrestre, que las fuerzas del mal (ahí casi totalmente concentradas, al ser expulsadas de los niveles superiores) aún conservan su poder, manteniendo incluso esclavizados y aprisionados muchos de los Hijos de la Luz y sus potenciales actuaciones dinámicas. Reasumir la conducción KW - Apocalipsis - Discipulos - Maestros PB - ial UR - https://biblioteca.inci.gov.co/handle/inci/18744 ER -